Chuquisaca se enfrenta estos días a un agudo problema ambiental debido a la intensa sequía que ya ingresa en su segunda temporada consecutiva y a la proliferación de incendios forestales que castigan a varios municipios ubicados en la región del Chaco, lo que ha obligado a las autoridades a tomar medidas de emergencia. El gobernador Esteban Urquizu anunció ayer la suspensión de labores escolares en los municipios de Huacareta, Muyupampa y Huacaya debido al descontrolado avance de incendios forestales, los cuales han provocado un verdadero desastre ambiental que no se había visto en las últimas seis décadas, según pobladores del lugar.
La cota de contaminación ambiental, originada en el humo de las quemas forestales, superó este lunes con cerca del 300 % los niveles mínimos permitidos, alcanzando un nivel de 425 microgramos por cada metro cúbico de aire, algo que se constituye en una verdadera amenaza a la salud pública, según autoridades de la Gobernación.
La humareda que se origina en el Chaco se extiende por centenares de kilómetros, afectando inclusive a la capital, Sucre, que desde hace varios días vive bajo un exasperante cielo gris que inclusive ha dificultado las operaciones aéreas en el aeropuerto capitalino.
La Asociación de Municipios de Chuquisaca (AMDECH) informó que al menos diez comunidades de la región del Chaco se encuentran bajo una intensa humareda y además están sufriendo las consecuencias de la quema de importantes reservas forestales, lo que amenaza la estabilidad ambiental de esa región.
Autoridades municipales expresaron su temor de que la devastación de los bosques, que se estima en un área de al menos 70 kilómetros, pueda comprometer las reservas de agua en una amplia zona de serranías que absorben la humedad de las lluvias de temporada.
