Según WWF, gracias a las renovables 2010 cierra con un 30% menos de emisiones de CO2. Esta buena noticia se debe al importante incremento de las energías renovables, que han llegado a representar el 46,2% de la electricidad producida, siendo las protagonistas la eólica y la hidráulica. Sin embargo, la organización destaca como negativo el aumento puntual de las emisiones por el uso del carbón autóctono y también el incremento de la producción nuclear.
Según el Observatorio anual de la electricidad de WWF, 2011 es un año importante para la toma de decisiones energéticas, que deben ir orientadas hacia un modelo energético sostenible y renovable, dejando de depender de los combustibles fósiles (petróleo y carbón) y acelerando la transición hacia una energía limpia, sin emisiones y 100% renovable.
El año 2010 finalizó con una reducción de emisiones de CO2 del sector eléctrico de un 28,7% respecto a 2009. Esta mejora de la calidad de la electricidad (pasando de calificación C a una B) es fruto de la mayor y mejor integración de las energías renovables en la red. Esto se debe a las fuertes lluvias y al exceso de viento de 2010, que han incrementado de forma considerable la hidráulica, la eólica, así como el resto de las energías renovables.
En cambio, ha aumentado durante varios meses de 2010 la contribución del contaminante carbón autóctono al resto de fuentes generadoras de electricidad. Como consecuencia, se ha producido una punta peligrosa de emisiones de CO2 por esta fuente de combustibles fósiles, desde abril a septiembre de 2010. No obstante, WWF subraya que en el conjunto del año ha habido una disminución general respecto a 2009.
También se ha incrementado la producción nuclear, con el consiguiente aumento de la cantidad de residuos radiactivos de alta, baja y media actividad, disminuyendo la calidad ambiental a la calificación D, respecto a 2009 (calidad C). WWF recuerda que la solución al tratamiento de los residuos nucleares de alta actividad sigue todavía sin resolver.
Asimismo, aunque la demanda en 2010 ha aumentado en un 2,54% respecto al año anterior, ha sido cubierta en su mayor parte por renovables, notándose un descenso importante de la contribución de los ciclos combinados de gas, que en 2010 han reducido sus horas de funcionamiento, a consecuencia de la disminución del consumo industrial. Mientras que en 2009 los ciclos combinados aportaron el 29,0% al mix eléctrico, en 2010 han aportado solo el 23,2%.
WWF España vuelve a pedir al Gobierno y a la sociedad que mantengan y refuercen el apoyo a las tecnologías de energías renovables en España. “Estas fuentes ‘limpias’ son las únicas que, junto con el ahorro y la mejora en la eficiencia energética, pueden hacer frente al doble reto de reducir las emisiones y proveer al país la energía necesaria para su funcionamiento, sin depender de importaciones que serán cada vez más caras. Las renovables son una posible solución a estos dos grandes retos”, afirma Raquel García Monzón, Técnica en Energía de WWF España. Y concluye: “ Desde WWF España consideramos que es necesaria y urgente una política energética clara, definida y bien planificada para afrontar los retos de 2020 y a 2050”.